Se presentan aquí seis borradores, cuatro de Giulia Adinolfi y dos de Rosa Rossi, relativos a la historia de las mujeres. No nos ha llegado un texto definitivo resultado de estos escritos preliminares. La finalidad de los mismos pudo haber sido la participación en un proyecto de elaboración de “materiales para una historia de las mujeres” que Rosa Rossi menciona en dos cartas, de octubre de 1978 y abril de 1979. El redactado de los textos se puede situar con toda probabilidad a lo largo del año 1979.

Por su contenido, los textos están claramente relacionados con el estudio que ambas realizaban sobre María de Cazalla. Giulia y Rosa eran conscientes de los retos que planteaba el hecho de trabajar sobre una figura femenina. Como investigadoras, ellas se reconocían en el paradigma de la historia social que había tomado forma con la irrupción del movimiento obrero en el escenario de la narración histórica revolucionando la producción historiográfica. En el momento que ellas vivían, el empuje del movimiento de mujeres hacía ineludible la reconsideración de los enfoques y los métodos de la investigación en ciencias sociales. Sus escritos forman parte del ejercicio de reflexión que ellas realizaron como estudiosas enfrentadas a este reto.

En conjunto, estos textos, aunque inacabados, aportan una serie de destellos de visión acerca de la historia de las mujeres que nos muestran cómo Giulia Adinolfi y Rosa Rossi compartieron las preguntas y la búsqueda de respuestas que las mujeres estudiosas de su tiempo se planteaban. Como otras historiadoras de su generación, Rosa y Giulia proponían no sólo señalar las ausencias femeninas y rellenar los huecos existentes en la historia narrada por hombres, sino explorar la experiencia de las mujeres, su cultura subalterna y las relaciones entre mujeres y hombres a lo largo de la historia. Giulia Adinolfi y Rosa Rossi destacaron en particular la importancia de estudiar los momentos en que emerge la conciencia femenina, a lo largo de la historia, como forma de conocer la propia tradición, la genealogía del movimiento de las mujeres. Para ellas estos episodios no se limitaban al sufragismo y a la lucha por los derechos que se había desarrollado en el mundo contemporáneo. En otros momentos de la historia, como el siglo XVI en el caso de María de Cazalla, algunas mujeres habían tomado la palabra y se habían reunido para escucharla y compartirla. Conocer estas u otras prácticas femeninas libres y también las causas de su retroceso y desaparición era, para Giulia y Rosa, un modo de enriquecer la visión del pasado de las mujeres y de sus intentos de liberación. Estudiar los momentos en que había emergido la conciencia de las mujeres era también un modo de fortalecer el movimiento feminista y alimentar su propuesta transformadora.

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